viernes, 29 de febrero de 2008

La niebla que rodea su futuro se hace,


día a día,


más espesa.






"...cuando muera, no habrá nadie que salve a los gorilas, Karisoke será una atracción turística y cesará de existir como centro de investigación". Dian Fossey



El único enemigo natural de los gorilas es el ser humano y sus acciones están empujando al gorila al borde de la extinción. Los conflictos, la caza furtiva y la tala de árboles está desterrando a los gorilas de sus tierras además de amenazar su supervivencia.





OBLIGADOS A ABANDONAR SU TIERRA








Es una situación que viene desde hace mucho tiempo, después de años de guerra fratricida en la que han muerto cerca de cinco millones de personas, las selvas de los gorilas se han convertido en refugio para muchas personas y en una atractiva fuente de ingresos dentro de un país de pobreza extrema.


A principios del año 2007, fuerzas rebeldes se hicieron con el control de gran parte del parque (Parque Nacional de los Virunga) para convertir la madera de sus árboles en carbón vegetal; un negocio que mueve al año más de tres millones de dólares. de no frenar esta situación, puede acabar en la extinción de los mayores primates de la Tierra

Mientras el comercio del carbón y la inestabilidad política amenazan a los gorilas de montaña, los de llanura del oeste africano sufren las consecuencias del comercio de `carne de bosque´ . La apertura de zonas de selva antes inaccesibles a través de los caminos creados por la industria maderera facilita vías de acceso hacia los recónditos refugios de estos últimos. Las poblaciones locales, cada vez más numerosas y con armas de fuego, aprovechan estas pistas para extender sus territorios de caza. Resulta más barato para las compañías madereras alimentar a sus trabajadores con animales del bosque que proveerlos de alimentos que tendrían que llevar desde las ciudades.








Poca gente conoce realmente la contribución de los gorilas en la regeneración forestal al dispersar las semillas.





Aunque en muchas ocasiones se les ha descrito como seres violentos y peligrosos, los gorilas son criaturas realmente gentiles e inteligentes. Las escenas de agresividad se producen cuando la unidad familiar, y sobre todo las crías, está en peligro.



Por desgracia, el financiamiento para la aplicación de las leyes se ha debilitado en los últimos años a favor de programas políticamente más correctos, como el ecoturismo, y en cuanto al Ébola nadie desea pagar por un programa de vacunación contra la enfermedad, ahora, no quedarán muchos gorilas para ser vistos por los turistas.


Actualmente los expertos calculan que sólo quedan unos 700 ejemplares de gorila de las montañas en todo el mundo, lo que les convierte en uno de los animales en mayor peligro dee xtinción. Más de la mitad viven en el Parque de Virunga, una región situada en el Congo y fronteriza con Ruanda y Uganda, mientras que los otros 320 contabilizados habitan en la Selva Impenetrable de Bwindi, en Uganda.


Si los hombres continuan su curso como hasta ahora, destruyendo el planeta, agotando sus recursos, acabaran con toda posibilidad de continuidad de las especies, los desencadenantes que provocarán la extinción, será la propia ansia de destrucción que está cambiando las condiciones del planeta por completo.



El planeta será mucho más triste sin ellos, los perderemos, como tantas otras cosas que perdemos...